El día de hoy se dio apertura a la Vigésimo Quinta Conferencia de las Partes (COP25), de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. La COP25, que se desarrolla en la ciudad de Madrid, España, se extenderá hasta el 13 de diciembre de 2019.

De la misma, participa una Delegación Nacional, encabezada por el Ing. Ulises Lovera, Director Nacional de Cambio Climático del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES), como así también funcionarios de la Dirección Nacional de Cambio Climático (DNCC) y de otras instituciones.

La sesión inaugural estuvo presidida por la Ministra de Medio Ambiente de Chile, Carolina Schmidt, quién en su intervención aseguró que su rol principal será aumentar la ambición en mitigación, adaptación y medios de implementación, pues “la crisis climática es el desafío más importante que enfrentamos hoy como humanidad”, expresó.

Por su parte, António Guterres, Secretario General de la ONU durante sus palabras de apertura indicó que, «La cumbre tiene negociaciones difíciles. Tenemos que concluir las líneas directivas de la implementación del Acuerdo de París». En ese mismo sentido sostuvo que «Más importante que las negociaciones es el hecho de que esta cumbre tenga la capacidad de dar un impulso muy fuerte a la acción climática».

Durante la primera sesión se aprobaron las agendas y las cuestiones del desarrollo de la COP25.

Este año, la COP tiene como objetivo avanzar hacia la implementación de los acuerdos que se han determinado en la Convención que establece obligaciones específicas de todas las Partes para combatir el cambio climático.

Se destaca la participación que tendrá el titular del MADES, Ariel Oviedo, en varios eventos de alto nivel, donde se reunirá con sus pares, a fin de considerar los elementos más efectivos para la implementación de las metas fijadas en el Acuerdo de París.

Los delegados paraguayos participaron de una sesión conjunta entre la Asociación Independiente de América Latina y el Caribe (AILAC) y ABU (Argentina, Brasil, Uruguay), presidida por el gobierno de Guatemala, a fin determinar los pasos a seguir respecto a la inclusión en la agenda de la COP del ítem de circunstancias especiales de los países de África y las implicancias de esta diferenciación para los países de América Latina y el Caribe.